Las separaciones y divorcios son procesos de la vida que están completamente a la orden del día. Es un proceso complicado y no siempre se está preparado para asumirlo, sobre todo cuando se tienen hijos. ¿Cómo afrontar una separación con hijos? ¿De dónde puedes sacar la fuerza necesaria para seguir adelante y que no afecte a la felicidad de los pequeños?
Si decides separarte, lo primero que tienes que hacer es hablar con tus hijos. Es importante que esté delante tu pareja, porque deberéis hablarlo todos; madre, padre y los niños. Es un paso que se da hacia adelante por el bien de todos, para ser feliz.
Es normal que los niños quieran a su padre y a su madre. El hecho de culparse el uno al otro o de tratar de poner a los hijos en contra, nunca es buena idea. Los niños necesitan tener al lado a las dos personas que la criaron. Pueden querer a ambos por igual y es importante que lo aceptes.
Ten en cuenta que si los niños detectan que una de sus figuras paternas es el o la culpable de esa situación, puede dar lugar a un conflicto de lealtades y hacer que todo sea más difícil para ellos. Como padre o madre, seguro que no quieres eso.
El siguiente consejo que quiero darte para afrontar la nueva vida con tus hijos, es que trates de ser justa/o. A pesar del divorcio, los niños seguirán queriendo a su padre y a su madre y no puedes tratar de impedir que se vean o perjudicar con los horarios. Es necesario que la otra persona siga formando parte de sus vidas.
Este punto es muy importante para afrontar la separación con los hijos de forma responsable. Cuanto mejor se lleven los padres, más fácil será para los hijos.
Si los hijos presencian peleas o escuchan frases negativas, pueden pasarlo mal y eso les puede acompañar para el resto de su vida.
En el caso de una separación en la que los niños pasan a estar en custodia monoparental o exclusiva de un miembro, toda la responsabilidad sobre los cuidados del día a día caen sobre dicho miembro. Por ello, debes tratar de estar siempre ahí y de atenderlos.
Si no es posible, se puede barajar la custodia compartida. Cada opción tiene sus ventajas y sus inconvenientes, pero lo importante es el bien de los niños.
Lo mejor para los niños es que los padres puedan colaborar para ofrecer una crianza en común, donde cada uno pueda transmitir lo mejor de sí mismos. Es importante que hables con tu pareja y que los niños no tengan que hacer de mensajero. Por salud, trata de establecer un método de comunicación sano con tu ex y que deje a los niños a un lado.
Un proceso de divorcio puede ser muy doloroso para los niños, incluso puede llegar a ser traumático. Hay niños que no consiguen aceptarlo en muchas ocasiones por las faltas expectativas de la mamá o del papá.
Lo primero que tienes que hacer, es ser honesto/a. Habla con tus hijos sobre la separación y lo que sientes, sin generar falsas expectativas. Hacerles creer que mamá y papá pueden volver juntos cuando no es probable, solo les causará más dolor y no tardarán más tiempo en superarlo.
Hay padres y madres que caen en este error. Si es tu caso, es importante que no utilices a los niños para obtener información sobre tu ex pareja, para saber cómo le va o si ya tiene a alguien nuevo.
Al principio puede ser muy duro, pero los niños siempre tienen que quedarse a un lado. Es lo más saludable, lo mejor para todos.
La realidad es que cada proceso de separación con niños es diferente. Hay personas que lo tienen superado desde hace mucho tiempo y no sienten nada por su ex, pero también las hay que no se lo esperaban y el mundo se derrumba sobre ellas.
La realidad es que cada persona es diferente y cada situación también. Por ello, si estás pasando una mala separación y no consigues levantar cabeza o no sabes cómo llevar la relación entre tu ex y tus hijos, puedes hablar con un psicólogo.
Un psicólogo especializado en materia de divorcios y separaciones podrá asesorarte y ayudarte para que consigas verlo todo de otro color, porque aunque pueda parecer que no hay luz, mañana será otro día.
Si necesitas ayuda con este proceso, recuerda que estoy a tu lado. ¿Hablamos?