¿Sientes que te cambia el estado de ánimo según la estación del año? A bote pronto, puede que el verano nos evoque más alegría y la lluvia del invierno nos cause más tristeza. Pero en los casos más graves es lo que se conoce como el trastorno afectivo estacional.
A continuación te hablo de los síntomas y causas, para que puedas despejar la incógnita sobre si lo estás sufriendo o no en silencio. Descúbrelo.
Antes de nada, debes saber que el trastorno afectivo estacional (TAE) existe y es un tipo de trastorno que se caracteriza por un cambio en el estado de ánimo durante ciertas épocas del año, especialmente durante el invierno.
Los síntomas del TAE incluyen principalmente los siguientes:
La realidad es que este trastorno es más común en las personas que viven en áreas con inviernos largos y oscuros, pero le puede pasar también a personas que viven en climas cálidos.
Los síntomas suelen comenzar en otoño o principios del invierno y desaparecen por completo así que llega la primavera o el verano, con la llegada de las buenas temperaturas.
Las causas exactas del TAE no se conocen con certeza, pero se cree que la falta de luz solar durante el invierno puede desencadenar cambios en la producción de ciertas hormonas en el cerebro, como la serotonina y la melatonina.
Los expertos creen que estos cambios específicos pueden afectar el estado de ánimo y causar síntomas de depresión en el paciente. Por lo que desde el punto de vista clínico tienen todo el sentido del mundo y es algo completamente normal, que le puede pasar a cualquier persona.
El TAE se puede diagnosticar mediante un examen físico y una evaluación psicológica.
Los síntomas ya los conoces y verás que guardan una importante relación con la depresión, por eso es recomendable hacer una evaluación exhaustiva para descartar otros trastornos mentales.
Afortunadamente, el trastorno afectivo estacional es tratable. Existen distintas terapias que se pueden llevar a cabo, como la terapia cognitivo-conductual (TCC) y la terapia de luz.
Para la terapia de luz, una lámpara de fototerapia imita la luz exterior. Es un tipo de terapia que funciona muy bien sobre el paciente, porque la luz consigue provocar un cambio químico en el cerebro que hace que mejore su estado de ánimo y se vean reducidos sus síntomas.
Los medicamentos también pueden ser útiles en algunos casos. Pero en cualquier caso lo debe evaluar un profesional de la salud para obtener el mejor tratamiento posible según el caso en concreto.
Si crees que sufres de este trastorno, recuerda que puedo ayudarte. Su prevalencia se encuentra entre el 1 y el 10% de la población, con lo cual es un trastorno conocido y que se puede tratar.
Estás a solo un paso de dejar de lidiar con este problema. ¿Y si hablamos?