¿Sabías que existen enfermedades físicas con origen psicológico? Dicho con otras palabras, son enfermedades que nos provocamos nosotros mismos y no, no es en absoluto un mito. Descubre si es tu caso.
¿Qué enfermedades pueden estar causadas por tu mente?
La enfermedad puede jugarnos malas pasadas. También en lo referente a las enfermedades. Esto es debido porque se afirma que existen enfermedades físicas que tienen su origen o de alguna forma están relacionadas con factores psicológicos.
Entre las más comunes, cabe mencionar las siguientes:
- Enfermedades cardiovasculares: el cuerpo puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares como la hipertensión arterial o enfermedades del corazón. Todo ello fruto de sufrir constantes episodios de estrés, ansiedad y depresión. Por ello es por lo que es tan importante tratarse cuanto antes.
- Trastornos gastrointestinales: el estrés y la ansiedad también pueden afectar el sistema digestivo. Esto podría derivar en trastornos como el síndrome del intestino irritable, la enfermedad inflamatoria del intestino, la gastritis o la úlcera gástrica, entre otras.
- Enfermedades respiratorias: vivir episodios críticos de estrés o picos de ansiedad también puede provocar que empeoren enfermedades como el asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
- Dolor crónico: cualquier tipo de dolor crónico se puede ver agravado si el cuerpo experimenta este tipo de episodios de ansiedad generalizada y estrés persistente.
- Enfermedades autoinmunitarias: diversas investigaciones sugieren que el estrés crónico y los grandes trastornos emocionales pueden ser los causantes de desencadenar o empeorar enfermedades autoinmunitarias. Muchas de ellas consideradas enfermedades raras, como la artritis reumatoide, la enfermedad de Crohn y el lupus.
Hay enfermedades que están muy influenciadas por factores genéticos, ambientales, psicológicos o directamente por el estilo de vida. Sufrir estrés, ansiedad o vivir en permanente tensión no asegura desarrollar alguna de estas enfermedades, pero es mejor aprender a lidiar con este tipo de trastornos.
¿Puede la terapia ayudar a lidiar con el estrés y la ansiedad?
Hoy en día, vivimos en un mundo más frenético y no paramos. Es importante centrarse en lo que verdaderamente importa y, si el estrés y la ansiedad se convierten en tus compañeros de vida, debes hacer algo para que eso cambie.
Hablar con un psicólogo te puede ayudar a lidiar con el estrés y la ansiedad. También es importante complementarlo con otras prácticas. Por ejemplo:
- Practica yoga y la meditación: hay ciertas prácticas que puedes realizar de forma frecuente para sentirte mejor. Por ejemplo, la meditación, la respiración profunda, el yoga, etc.
- Haz ejercicio de manera regular: algo tan sencillo como salir a caminar 30 minutos todos los días, te puede ayudar a lidiar con el estrés y la ansiedad. Si te cuesta caminar, puedes optar por probar un nuevo deporte o actividad física.
- Trata de organizar mejor tu tiempo y tu agenda: aunque nos cuesta reconocerlo, en muchas ocasiones nos ocasionamos nosotros mismos el estrés. Dejamos todo para el último día y luego nos entran las prisas. Para evitar pasar por esto, lo que tienes que hacer es aprender a priorizar tus tareas y a delegar responsabilidades en terceros.
- Sigue una alimentación saludable: tomar a diario una dieta equilibrada y rica en nutrientes también te puede ayudar a gestionar mejor los niveles de estrés y lidiar con la ansiedad.
- Aprende a decir que no: sabemos qué decir “no” puede ser complicado para algunas personas. Sin embargo, todo se aprende. Ser capaz de rechazar algo cuando no puedes hacerlo, es el paso hacia evitar lidiar con situaciones que te terminan agobiando y estresando.
Teniendo en cuenta las enfermedades que se pueden desarrollar a partir de sufrir ciertos episodios de salud mental, es importante tratar de aprender a vivir de otra manera, para evitar el posible desarrollo de una enfermedad asociada.