Si sientes que eres una persona que depende emocionalmente de otra, es posible que te encuentres algo frustrada porque te gustaría ser más independiente.
También es posible que sientas miedo a quedarte sin el apoyo o la compañía de esa persona o creas que la condicionas un poco en algunos momentos.
Es importante que sepas que estos sentimientos ocurren muy a menudo y que se pueden llegar a mejorar.
Hoy vamos a hablarte sobre las características de una persona emocionalmente dependiente (para ver si te sientes identificado/a con ellas) y cómo mejorar.
La dependencia emocional es una forma de necesidad excesiva o dependencia de otra persona para sentirse bien y satisfecho emocionalmente.
Solo se siente tranquila, valiosa y cómoda si la otra persona está cerca o si valida sus decisiones o comportamientos.
Por ese motivo, una persona con dependencia emocional puede buscar en todo momento la aprobación, el reconocimiento y la atención de otra persona y puede llegar a sentirse desesperada sin su presencia o apoyo.
Esto puede ocurrir con una persona concreta (la pareja, un familiar o amigo) o con varias.
Esto puede llevar a una serie de problemas en las relaciones y la vida diaria, incluyendo falta de independencia, falta de autenticidad, preocupación, etc.
Estas son algunas de las particularidades de una persona emocionalmente dependiente:
Como ves, una persona dependiente emocional suele sentir inseguridad sobre su capacidad para resolver problemas sola y sentirse bien consigo misma.
El origen de ser una persona emocionalmente dependiente suele estar influenciado por una combinación de factores psicológicos, sociales y ambientales.
Es importante tener en cuenta que la dependencia emocional es un patrón complejo y multifactorial y que cada persona puede experimentar su propio origen y desarrollo.
Algunos de los factores más comunes incluyen:
Si sospechas que tienes una dependencia emocional, es importante buscar ayuda profesional.
Un psicólogo puede ayudarte a explorar tus patrones de dependencia emocional y a encontrar estrategias efectivas para superarlos.
Trabajaréis en mejorar tu autoestima, desarrollar habilidades de resolución de problemas y aprender a ser más independiente emocionalmente.
Para las personas que sufren dependencia emocional es muy importante llegar a desarrollar una autoestima sana.
Esto les ayudará a aprender habilidades para resolver problemas y afrontar sus miedos e inseguridades desde la calma.
Todos en algún momento podemos sentirnos dependientes emocionalmente de otra persona, pero si esto se vuelve un patrón en nuestro día a día, acabará limitando nuestras capacidades y haciéndonos sufrir.
Acudir a terapia psicológica es la solución a la dependencia emocional.
Reconocer los motivos de esta y trabajar en ellos junto a un profesional puede cambiar la vida de una persona dependiente.