En un momento de crisis e incertidumbre, cualquier persona puede llegar a pasarlo mal. En el caso de los negocios, las crisis pueden ser especialmente duras para el jefe, dado que debe seguir al frente y velar por su empresa hasta el final. Pero, ¿cómo debes actuar como líder en un momento de crisis?
Saber cómo actuar en cada situación nueva que se te presenta no es fácil. Más aún si eres el líder de una empresa, porque muchas personas dependen de ti.
Pero si has llegado tan lejos y eres el líder, es porque tienes valía suficiente para conseguir lo que te propongas y puedes sacar a tu empresa adelante en medio de una crisis laboral. Para ello, hay que ir por partes.
Para actuar correctamente en medio de una crisis laboral en tu propia empresa, no dudes en seguir los siguientes 8 consejos:
Lo primero y más importante, es tratar de mantener la calma. Por muy grave que se presente la nueva situación, necesitas parar, respirar e inspirar hondo y tratar de relajarte, para no tomar ninguna decisión importante en caliente.
Una vez hayas conseguido mantener la calma, debes transmitir esa calma a los demás miembros del grupo. Confían en ti y si tú estás bien, ellos estarán bien.
Decir la verdad es muy importante. Analiza la gravedad de la situación y las previsiones a corto o a largo plazo. Es así cómo podrás obtener información certera y poder ser honesto con tus trabajadores.
Ten en cuenta que mentir solo para ganar tiempo puede ser una bomba de relojería y no es bueno para ninguna de las partes. Es mejor confiar en los tuyos y tratar de ir con la verdad por delante sobre lo que ocurre
Aún siendo líder, necesitas tener a tu lado a un buen equipo en el que poder delegar ciertas competencias. Si todo recae en ti, puedes no soportar con tanto peso y tantas responsabilidades, por lo que es importante aprender a delegar.
Trata de reunir un equipo con personas competentes y lleva a cabo una serie de estrategias para tratar de salir de la situación actual.
La comunicación es fundamental en todo negocio. Si eres un líder que se comunica de forma transparente con tus trabajadores, tendrán total confianza para poder transmitir sus ideas.
Evita ser un líder excesivamente frío o excesivamente carismático, pero sobre todo tener inteligencia emocional y asertividad. Así como sentido común y humanidad.
Un buen líder nunca culpabiliza a los demás, señalando únicamente los problemas y errores ajenos en vez de los suyos mismos. Esta situación sólo generará más caos y ansiedad en la compañía.
En momentos de crisis laboral es fundamental que exista un liderazgo compasivo, que conecte con el dolor humano y se preocupe por las personas. Para ello, céntrate en buscar soluciones a los problemas, no culpables.
Un buen líder no debe dudar a la hora de pedir ayuda. Si la necesitas, no temas en pedir más recursos. Como líder debes saber pedir ayuda y también tender una mano si otros lo necesitan. Así como mostrarte abierto y flexible frente a redes colaborativas donde puedan fluir nuevas ideas y soluciones.
Si estás sufriendo una crisis en tu empresa, es importante que conozcas en todo momento en qué estado se encuentra, las previsiones y las posibles soluciones a los problemas. Para ello, trata de monitorizar constantemente los avances, encontrar errores y solucionarlos, anticiparse a riesgos, etc.
Las crisis pueden suceder en cualquier momento. Están completamente a la orden del día y nadie está a salvo de sufrirlas.
Aunque si bien es cierto que sufrir ansiedad anticipatoria no es bueno, sí es importante que trates de anticiparse a posibles errores que puedan surgir en tu empresa, para solucionarlos cuanto antes y evitar improvisar.
Diseñar estrategias de respuesta a situaciones similares y que ya has vivido es fundamental para el futuro de la empresa. Es una obligación que tiene el líder para evitar improvisar y mantener siempre el control.
Es así como todo te será más sencillo y no tendrás que lidiar con la ansiedad o el estrés que generan las crisis laborales, sobre todo cuando no se sabe qué hacer o cuando surgen los arrepentimientos por todo lo que se pudo haber hecho y no se hizo.
Si te encuentras en una situación así y necesitas ayuda, recuerda que estoy a tu lado. Un psicólogo te puede ayudar a trabajar no solo tus dotes de líder, sino también la ansiedad o el estrés que pueden surgir en según qué situaciones. ¿Hablamos?